Hospital y Centro de Acogida (Teis-Vigo)

Leam 62

El encargo provenía de una orden religiosa dedicada a cuidar enfermos terminales, no se trataba pues de hacer un hospital tradicional, sino más bien una residencia en la que cuidar a estos enfermos y que éstos viviesen en un entorno agradable y cómodo en el que fuese fácil socializar como parte de un tratamiento sólo paliativo. Así se cuidaron especialmente el espacio social de estancia, el comedor, la facilidad de accesos y comunicaciones y una fácil relación con el jardín, además de los espacios complementarios, capilla, tanatorio y celdas de los hermanos. Al tiempo se diseñaron amplias terrazas cubiertas, un espacio de recreo necesario dada la climatología, que con el tiempo se cerraron para optimizar el espacio para incrementar el número de personas atendidas.

En la planta baja y segregado del uso principal se planteó una zona para transeúntes, aquellas personas sin recursos que llegan a la ciudad y requieren un cama, aseo y comida.